¡Tu madre!

¿Y saben por qué hay tanto delincuente menor de edad ahora?
Así como la madre de Brenda, hay muchas. Sin un hombre al lado que cumpla con su responsabilidad (en el caso de ella, era viuda, pero hay millones de hombres mierdas que se dan la vuelta y se van). No es que se necesite a un hombre, pero la carga de dos o más hijos, para una sola mujer, en un país donde si estás en edad fértil, tu posibilidad de conseguir un empleo, que sea igualmente remunerado a los hombres, es muy baja. No hay empleos de medio tiempo, y si los hubiera no serían dignamente remunerados, porque aquí no se toman medidas para el bien de la población, sino para el bien de los «héroes empresarios que crean plazas de trabajo y con eso contribuyen al desarrollo», eso es lo más falso que puede haber.

Como madre y mujer, he tratado de mantener un hogar donde el padre de mis hijos cumpla con su responsabilidad (aunque él diga que me «ayuda» o me «apoya» como si la responsabilidad fuera mía al 100%), aunque me deteste y bueno, una mujer como yo que no «guarda silencio» así como él mismo dice, no es un buen partido para ningún hombre, nadie nos «aguanta», nos gusta «hacer show». Pero resulta que cuando un hombre quiere hacer su vida, tiene la libertad de desaparecerse cuando le da la gana para andar con otra familia que no es la suya, con otra mujer y otros hijos que no son los suyos, mientras la madre sola, trabaja todo el día sin saber lo que pasa con sus hijos, pensando que en estos tiempos los niños se valen por si solos. No es verdad, en estos tiempos nos necesitan más.

Así como la madre de Brenda, que merece toda mi admiración por tener una hija luchadora e inconforme con la misera en la que vivía, así como ella, jornalera en una maquila, que no se enteró de que su hija había sufrido aquella desgracia sino hasta que volvió de su trabajo, cansada, hecha huevo, de noche, así hay madres cuyos hijos caen en otro tipo de desgracias, las pandillas por ejemplo y ellas no se enteran. Por la chingada, no somos heroínas!

Cuando hicimos la investigación para «Yo no lo provoqué», el monólogo que presentamos el año pasado, leí casos desgarradores de comunidades completas propiedad de pandillas, donde las madres solteras trabajaban todo el día creyendo que sus hijos estaban en un lugar seguro, en su casa, mientras sus hijas eran botín para pandilleros, para jefes de esas pandillas en las cárceles, porque cualquier cosa es buena para ellos, las niñas, las chicas, los chicos y sabemos que no pasan de los 18 años al enrolarse, mueren antes, sin antes llevarse a unos cuantos cristianos por delante a la hora de extorsionar, eso cuando no son constantemente violadas por decenas de asquerosos pandilleros sudados, sucios, en un cuarto vacío con la colchoneta donde violan a todas e incluso las matan, colchonetas llenas de semen y sangre…de lágrimas. Son violadas por horas, pasan los turnos de hombres hasta que ellas pierden la cuenta, si señores, eso pasa todo el tiempo TODO EL TIEMPO EN TODAS PARTES! Mientras mamá trabaja.
Así como los soldados, los adolescentes son entrenados para matar mientras mamá trabaja para darles casi nada.
¿Cuánto cuesta un alquiler?
¿Cuánto es de servicios básicos como luz, agua? Sin contar teléfono porque sin eso si se puede vivir.
¿Cuánto puede costar la educación? Aún siendo establecimiento público, se compra uniforme, libros, cada cosita que piden casi a diario, que papel no se que, que una botella de algo, que tapaderas de que se yo, todo se compra.

Malditos mil veces los que han dicho «los papás tienen la culpa», porque no es general, porque no conocen las desgracias de la familia, porque no toman en cuenta el maldito machismo y patriarcado que ocasionan esas desgracias. Porque cuando el hombre es criado con la idea de abarcar muchas mujeres, sin tomar en cuenta una estabilidad familiar, es mejor impedirle que se case y que procree, si quiere su libertad completa, que la tenga, pero que no de ese ejemplo a los hijos.

Por eso SEÑORES, sobre todo hombres, porque sus excusas siempre son «soy hombre» y eso les da licencia a faltarle a su hogar, es por eso que muchas personas prefieren no casarse, no tener hijos y está bien, es mejor así.
Por eso se cae el mito de que la familia es el núcleo de la sociedad, porque quien quiera tener hijos debe mantener su responsabilidad hasta el último día de su vida, porque los hijos no son sólo coger, levantarse de la cama y no volver, son para siempre y por encima de nuestras propias calenturas, de nuestras propias vidas si es necesario, porque la responsabilidad es demasiada, pero en países como estos, la mujer es la que la tiene que asumir completa, trabajar hasta la muerte, y no sólo la propia, hasta la muerte de sus hijos.

Muchas no contamos con el poyo de tías o abuelas y mucho menos la posibilidad de pagarle a alguien que haga nuestro papel de madre, porque no ganamos lo suficiente, esa si es una realidad.
Me dan risa los feminismos adoptados, de verdad, me cagan de risa cuando se pretende aplicar lo que un feminismo es en Europa, a lo que es casi imposible en Guatemala, falta construir el propio.

Mayo, mes de la madre. Sociedad guatemalteca ¡TU MADRE!